Incendios y deforestación en Bolivia: causas y consecuencias

Incendio en la Chiquitania en 2019. Foto: International Right o Nature Tribunal
Incendio en la Chiquitania en 2019. Foto: International Right o Nature Tribunal

En 2019, la Amazonía atrajo la atención del mundo debido a los incendios forestales de gran magnitud que se registraron en Brasil y Bolivia. Hasta finales de ese año, el fuego arrasó alrededor de 7,2 millones de hectáreas de bosques en la Amazonía de Brasil (INPE, PRODES, 2020) y 5 millones hectáreas en Bolivia (TIERRA, 2019). Este desastre ambiental acaeció en contextos nacionales similares: las políticas del gobierno de Jair Bolsonaro alentaron la explotación comercial de la Amazonía y en Bolivia se implementó la ampliación de la frontera agrícola y el proyecto de exportación de carne vacuna a China.

En los años siguientes, si bien los incendios disminuyeron en ambos países, la deforestación continuó aumentando. Aunque entre ambos enómenos existe una directa y estrecha relación, no son lo mismo. Por lo general, los incendios abarcan extensiones mucho mayores que las áreas efectivamente desmontadas. El fuego está provocado mayormente por la mano del hombre para habilitar nuevas áreas agrícolas o para renovar los pastizales de los potreros ganaderos; pero, a menudo, se convierte en incendios descontrolados. La deforestación se diferencia de este último porque las pérdidas de bosques y vegetaciones nativas son duraderas. 

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COLQUE, Gonzalo
COLQUE, Gonzalo

economista